sábado, 29 de marzo de 2014

Guerras pasadas


Hacía días que el sargento deambulaba solitario por las trincheras, pero aquella noche entró en el barracón y se sentó a comer con la tropa. A media cena se levantó y nos preguntó para qué lustrábamos cada mañana las bayonetas, para qué ajusticiábamos a los desertores, para qué engrasábamos los fusiles cuando hacía meses que no había munición, cuando nadie respondía a la radio y nada se sabía del general. Luego estrelló el plato contra el suelo.
Para qué, nos gritó, si el enemigo regresó a casa, si la guerra hace años que terminó.

Todo el mundo vive guerras que podríamos olvidar y pasar página.
En budismo hay lo que se llama "soltar".  Básicamente trata de relajar la mente, de no encerrarte en un pensamiento concreto, en una opinión y abrirte a otras posibilidades.  Si te agarras mucho a una opinión concreta, no dejas la posibilidad a otras opciones.

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